domingo, 18 de octubre de 2015

HACIA UNA ESTÉTICA DE LA MÚSICA POPULAR SIMON FRITH

                       
HACIA UNA ESTÉTICA DE LA MÚSICA POPULAR  SIMON FRITH


La música seria es importante porque trasciende las fuerzas sociales; la música popular carece de valor estético porque está condicionada por ellas porque es útil.
Si nos aventuramos a sugerir que el valor de, pongamos por caso, la música de Beethoven puede ser explicado a partir de las condiciones sociales que determinan su producción y su consiguiente consumo, se nos acusará de filisteos-las teorías estéticas de la música clásica siguen manteniendo un cariz decididamente a-sociológico.
La música popular, por el contrario, se considera buena sólo para hacer teoría sociológica con.
El acierto con el que logramos explicar la consolidación del rock'n'roll o la aparición de la música disco se toman como prueba de su falta de interés.
Relacionar música y sociedad se convierte así en un cometido distinto en función de la música con la que estemos.

Las valoraciones que se hacen en tales situaciones tienen lugar dentro del mareo sociológico general. Pero si bien esto nos permite «explicar» hasta un cierto punto la música disco o el rock, no nos proporciona argumentos para comprender por qué un determinado disco de rock o un tema de música disco es mejor que otro. Si nos detenemos en las explicaciones de los fans y de los músicos (o incluso en las de las discográficas) encontraremos un argumento recurrente. En el mundo del pop todos somos conscientes de que existen unas fuerzas sociales que determinan la música pop «normal»: ¡un buen disco, una buena canción o un buen sonido son precisamente los que logran trascender esas fuerzas!






No hay comentarios:

Publicar un comentario